Prólogo de novela de verano...

Siempre quise escribir una novela, ligera, fugaz, fresca, como la brisa a orillas del mar en pleno mes de agosto...así que bueno sólo necesitaba cuestión de tiempo...y un poco de imaginación (o aburrimiento...según se mire...) pero la imaginación es como la inspiración...para que sea productiva ha de pillarte trabajando.
Allá va...
"-Darling!!!- A lo lejos Nicky bandea el brazo de izquierda a derecha entre los abstraídos transeúntes que pasan por su lado, quizás mas pendientes, mas interesados en sus cosas que en lo que acontece a su alrededor.

-Llegas tarde. Casi tengo que llamar al 112 por lipotimia espásmica - Y mientras dice esto va apartándose cuidadosamente, meticulosamente, hacia un lado.

-Nicky, eso no existe……Jajajaja….eres una exagerada…además sólo son las 9:30, habíamos quedado a las 9:00…pero he tenido que repasar la lista ocho veces porque cada vez que lo hacía, me daba cuenta de que me faltaban cosas, así que voilá, tenemos víveres para una semana.

Nora es demasiado previsora, demasiado porque quizás no era necesario llevar tres maletas y dos neceseres de mano, pero es natural en ella, que acostumbra a tapar agujeros de su corazón con innumerables compras innecesarias, para San Valentín un anillo de perlas cultivadas, para su cumpleaños un reloj con circonitas en la esfera…y así todas y cada una de las fechas señaladas, y las no tan señaladas.

Mientras va dejando todo el equipaje en la acera, Nicky va apartándose mas hacia un lado, y de pronto lo ve, un mini Cooper descapotable en color rosa chicle con asientos de cuero negro, y enorme velocímetro de acero cromado, también en negro.

-Pero…pero…Nicky! Es fantástico, increíble, hermosísimo!....Espectacular! Es…es…un sueño!

-Jajaja… Vale, vale cari lo se…es único! Una ganga que me ha conseguido mi amigo John, de segunda mano, pero apenas tiene kilómetros.

Y mientras una sigue hablando de su coche nuevo, la otra va pensando la gran aventura que les espera, la una y la otra, la otra y la una, siguen así, como si no fuera con ellas el resto del mundo, subidas a veinte kilómetros del asfalto en un adorable mini Cooper de color fucsia."